En una partida participan de dos a cuatro personas. Cada persona tiene su parte del tablero de juego, al que llamamos el camino de la vida, y que contiene un sobre del inconsciente personal (del que irán saliendo mensajes conforme sea el momento) y cuatro cartulinas a rellenar para ir superando los cuatro niveles del juego: físico, mental, emocional y espiritual.

Cada participante, a la vez que va haciendo su propio camino, interactúa con los compañeros, lo que suele provocar que el proceso de unos ayuda al de los otros.

Yo te acompaño y guío durante el proceso. Antes de la partida te enseño el funcionamiento y las normas de juego. Durante la partida ejerzo de “pepito grillo”, es decir: te ayudo a entender un mensaje o a tomar conciencia de aquellas cosas que haces y no estás pudiendo ver. También puedo canalizar información para ti si no logras avanzar por ti mismo/a. Al terminar te doy una visión externa de tu juego para que te vayas con la máxima información posible.

• Crear milagros en tu vida

• Cambiar el dolor por la toma de conciencia.

• Comprobar tu intuición.

• Dejarte guiar por tu ángel de la guarda.

• Despejar tu inconsciente.

• Recibir respuestas del universo.

• Dinamizar tu vida y hacer que tu energía se mueva.

• Transformar la ansiedad en paz y el aislamiento en unión.